El retoque de piel es un paso fundamental en la fotografía de retrato. A todos nos gusta que nuestra fotografía luzca bien y que tenga un resultado profesional.
Existen muchas maneras de poder retocar piel, pero una de las más comunes y más populares es la famosa “Separación de frecuencias”.
Esta técnica consiste en separar la fotografía en dos capas diferentes. Por un lado la textura y por otro el color.
El objetivo es poder trabajar en ellas sin que se afecten mutuamente. Este proceso puede facilitarnos el trabajo a la hora de suavizar el rostro y eliminar imperfecciones causadas por el acné.
A continuación te mostramos un videotutorial donde podrás aprender a cómo realizar esta técnica.